miércoles, 18 de noviembre de 2015

Ciegos...

Y justo al ser humano le falta ser humano. ¿En qué mundo vivimos? ¿Por qué nos matamos entre nosotros? ¿Y se supone que somos el ser vivo más inteligente? ¿De verdad? Cada día que pasa estoy más confundida. No sé dónde quedó eso de “humanidad”, “solidaridad”... ¿Dónde? No paro de escuchar esas palabras por todos sitios pero, no, no las encuentro en ningún hecho. Y es que “últimamente” estamos viviendo situaciones que nos devuelven a la realidad que se está viviendo en este mundo. Situaciones horribles, donde unas personas a las que se les ha ido la cabeza y por defender su “religión” están atentado contra personas inocentes, que nada tienen que ver con sus locuras... Hasta hace dos días, todos parecía que éramos ciegos ante las miles de barbaridades que ocurren en muchos sitios, hasta que ocurrió en un país cercano, un país que está a nuestro lado, un país más “importante”. Nos alarmamos, nos solidarizamos con ellos, llenamos las redes sociales con su bandera y con miles de fotos apoyándoles... ¿y los demás?  ¿Dónde están los demás países que día tras día tienen bombardeos? ¿Dónde cada día mueren personas inocentes por los mismos motivos? Sí, cada uno es libre de apoyar a quién quiera, lógicamente... pero me parece triste que dejemos olvidadas a tantas personas solamente porque no son de nuestra zona o “como nosotros”. De verdad, solo quiero con este texto haceos reflexionar un poquito, sólo un poco. 

martes, 10 de noviembre de 2015

Personas en peligro de extinción.

Y es que en esta vida hay personas que te hacen sentir bien con sólo tenerlas al lado. Con saber que está ahí, tú te sientes más segura, te sientes capaz de todo. Son como un colchón que te protegerá en caso de caídas. Un colchón que parará tu caída y te impulsara, con su rebote, a subir más alto. Y es que cuando te abraza, ves que el mundo vuelve a tener sentido. Hay personas que solo ocurren una vez en tu vida. Personas en peligro de extinción. Que son buenas e incondicionales. Personas que saben qué necesitas, cuándo lo necesitas y cómo lo necesitas. Personas que, a veces, te conocen mejor que tú mismo. Y las miras a los ojos, y sabes que son verdaderas, que te quieren y que nunca te harán daño. Nunca. Personas que te cogerán de la mano para seguir adelante y que irán a tu lado en cada paso que des. Personas que creerán en ti, a pesar de todo, a pesar de todos. Personas que siguen ahí cuando piensas que se ha ido todo el mundo. Y aún en los días cuando no te soportas, están ahí para recordarte que vales más de lo que crees. Y te hacen reír, reír a carcajadas, en momentos donde veías imposible dejar de llorar. Y es que esas personas son las que hacen de este mundo, un lugar mejor para vivir.

lunes, 9 de noviembre de 2015

Cosas inevitables.

Y, sin darte cuenta, ya se ha colado en tu vida. “No quiero enamorarme de nadie, no quiero enamorarme de nadie” te repites constantemente. Pero hay cosas inevitables y, así es, esta es una de ellas. Lo intentas, pero no puedes dejar de pensar en él. En cómo estará, en si te tendrá tanto en su mente como tú lo tienes en la tuya, en si tendrá ganas de verte, de abrazarte... Porque tú sí, tú te mueres por darle un abrazo fuerte, largo... de esos en los que el mundo se para y sólo existís él y tú. Y es que no puedes evitar que te salga esa sonrisa tonta cuando hablas de él. Y decir “no, no me gusta” cuando la gente nota lo que tú te niegas a reconocer. Porque ¡no pasa nada! Ese chico te gusta, te encanta escuchar su voz diciendo tu nombre, te hace reír a carcajadas con cada una de sus ocurrencias, siempre está ahí para escucharte y darte ese abrazo cuando más lo necesitas. No temas a quererlo, a darle ese amor que él mismo está haciendo que nazca en ti. Porque no hay nada más bonito que dar amor mientras lo recibes. No tengas miedo a nada, porque con ese miedo, sólo te estás perdiendo lo que podría ser una bonita historia de amor, tu historia de amor. 

jueves, 29 de octubre de 2015

Una roca.

Siempre me han dicho que soy una desconfiada y que tengo la coraza puesta. Siempre me han reprochado que estoy a la defensiva, que soy una pesimista. Pero ¿alguien alguna vez se ha parado a pensar por qué soy así? No he nacido con una armadura de “chica fuerte e insensible”. Es más, soy de las personas más sensibles que hay sobre la Tierra. Pero, lo que ahora soy, no tiene nada que ver con lo que era. Y es que llevo acumuladas miles de decepciones y golpes en el corazón. Porque, cuando confías en alguien y ese alguien te falla, algo cambia en tu interior. Llega un momento, donde hasta la persona más buena, te hace pensar que algo malo tiene. Que mientras estás con alguien, sabes que terminará haciéndote daño. Y cuando la vida te sonríe, ya estás preparada para que te haga llorar en cualquier momento. Porque cuando te han hecho tanto daño y han jugado tanto contigo, es imposible volver a tener esa inocencia y confianza que antes te caracterizaba. Y sí, sigo siendo la tonta que intenta creerse las mentiras de los demás, que piensa que no hay malas intenciones, sino malos entendidos. Pero, en el fondo, sé toda la verdad. Por desgracia (o por suerte), mi instinto protector nunca me falla y sé quién terminará jugándomela. Este modo de vivir o pensar, puede no parecer bien al resto del mundo, pero a mí me ayuda a no sufrir tanto cada vez que me decepcionan. En parte, cuando te esperas una decepción, te hace menos daño. Y así es como me convertí en una roca, una roca con mil sentimientos por dentro, pero la más dura de todas por fuera. 

miércoles, 28 de octubre de 2015

Ese cuento de hadas...

Y es que mi hobby favorito es morderte la sonrisa. Esa sonrisa que te sale cuando te digo que me faltan palabras para decirte lo mucho que te quiero. Creo que nunca llegarás a imaginarte lo mucho que significas para mí. Porque mi mayor refugio son tus brazos y mi canción favorita, tus carcajadas. ¿Felicidad? Sólo era una palabra más en mi diccionario hasta que llegaste tú y le diste significado. Y es que si yo soy la niña de tus ojos,  tú eres el hombre de mis sueños. Y no, no eres perfecto, a veces te enfadas por tonterías, llegas siempre tarde cuando quedamos y nunca te acuerdas de dónde has dejado las cosas. ¡A la mierda la perfección! Me encanta desenfadarte a base de cosquillas y besos; me desespero cuando llegas tarde pero adoro tu sonrisa de disculpa ; y gracias a tu despistes, puedo jugar un ratito contigo y verte buscar tus llaves como un niño busca a su amigo en el escondite. Y es que llegaste a mi vida poco a poco, sin apenas darme cuenta y, así, sin más, te hiciste un hueco en mi corazón que sólo tú puedes ocupar. Y, sin saberlo, te has convertido en ese cuento de hadas que he soñado vivir desde que era un niña y ¿por qué no? Lo has mejorado. 

domingo, 27 de septiembre de 2015

Mínimos placeres.

Que tu sonrisa sea más grande que todos esos problemas y el estrés que arrastras siempre contigo. Seguro que lo has escuchado más de mil veces pero es cierto eso de que la vida es corta. No podemos desperdiciarla preocupándonos por pequeñas tonterías que nublan nuestro gran mundo. No podemos dejar que nuestras lágrimas empañen la luz de cada día. Por eso, disfruta de cada instante como si fuera el último. Saborea cada momento, siente el viento en la cara, la lluvia en tu piel y el sol en tus ojos.  No hay nada que de más felicidad que deleitarse con mínimos placeres que marcan la diferencia. Una manta en invierno, una buena película en un día de lluvia, tu canción favorita sonando en la radio, un libro en el que vivir mil aventuras, un trozo de chocolate a mitad del día, un abrazo donde el mundo se pare por un instante, una sonrisa de cualquier persona con la que te cruces, un “buenos días” de tus padres... Y es que la vida es eso, una suma de pequeños detalles que la hacen bonita, muy bonita.

Del revés.

Negro. No hay más color en tu vida que negro. Todo es oscuridad, sin nada de luz o algo de alegría. Todo son problemas, todo te sale mal. No te apetece seguir adelante, no tienes ganas de levantarte por las mañanas, no ves nada de bueno en cada uno de los días. No hay nada que pueda hacerte sacar una sonrisa. Nada. Y pasa el tiempo y todo sigue igual. La misma rutina, las mismas ganas de tirar la toalla. Y, un día inesperado, aparece. Aparece esa persona que rompe todos tus esquemas. Que da la vuelta a tu rutina y pone tu vida del revés. Esa persona que logra recoger cada pedacito de ti, uno a uno, y los junta y te recompone. Te demuestra que la vida no es tan horrible, que en el mundo aún hay esperanza. Que vale la pena levantarse cada mañana y luchar por lo que uno quiere. Que todo lo que te propongas, podrás conseguirlo si le echas ganas y te dedicas a ello. Te hace volver a creer en ti. Volver a pensar que después de todo, vale la pena seguir intentándolo. Y es que el mundo a veces puede parecer un lugar aterrador, pero créeme, con una de estas personas a tu lado, estarás más que preparado para enfrentarte a cualquier obstáculo que se te ponga por delante. 

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Amor a primera mirada.

Me miras. Te miro. Sonreímos. Sólo tú y yo sabemos lo que pasa entre nosotros. Química. Física. ¿Qué más da? Sólo sé que la conexión contigo es infinita. Va mucho más allá de los besos y las caricias. Más allá de las palabras bonitas y las miradas llenas de amor. Tú me has hecho sentir algo más, mucho más. ¿Nadie se da cuenta de que eres el ser más maravilloso de esta tierra? Solo con cogerme de la mano haces que me recorran mil escalofríos. Y si me sonríes, el mundo entero se para y se centra en tu boca, en ese hoyuelo que se te forma en el lado derecho cuando esbozas una sonrisa. Me encanta escuchar cuando hablas y me miras. Me miras a los ojos y me veo en ellos. Y es que tus ojos son mi mejor espejo; no hay sitio donde mi reflejo sea más bonito. Y no, lo nuestro no ha sido un flechazo. Lo nuestro ha sido un amor a primera mirada. Porque fue cruzarme con tu mirada y saber que eras tú. No es algo que pueda explicarse, ni decirse con palabras. Es algo que se siente. Y yo siento que quiero estar contigo toda mi vida. Porque no he conocido vida más plena que la que he vivido desde que estoy a tu lado. 

sábado, 5 de septiembre de 2015

Perdida en ti.

Esa sonrisa que me sale con solo pensar en ti. Esos nervios que me provoca el saber que me estás esperando al girar la esquina. Ese lunar que tienes en la espalda, justo donde acaba el cuello, que se asoma por detrás de tu camiseta. Ahí es donde quiero quedarme. Perdida en ti. Y no quiero que nadie me encuentre. Porque eres tú el único que me hace sentirme yo. El único que conoce cada una de mis sonrisas, sabiendo exactamente cuál de ellas tiene tu nombre y apellidos. Y eres tú el que me has hecho conocer eso que todos llaman “amor”. ¿Y qué es el amor? Amor es despertarme a tu lado y ver como duermes. Amor es cómo abres los ojos y me sonríes, con esa sonrisa verdadera y espontánea que te sale siempre por las mañanas. Amor es que sepas exactamente cómo me gusta la leche con Cola Cao, y discutas conmigo porque quieres hacérmela tú. Amor es hacer planes, planes para hacer juntos y cumplirlos, cumplirlos todos y cada uno de ellos. Amor es mirar nuestras fotografías y que en todas, salgas mirándome con esos ojos. Y que en todas salgamos sonriendo. Amor es saber que cuando todo se me venga abajo, voy a tenerte a mi lado. Amor es que sepamos disfrutar del tiempo juntos, saboreando cada segundo. Amor es acurrucarme a tu lado en el sofá y que me acaricies el pelo. Amor es no odiar los domingos, porque es nuestro día de ver películas entre beso y beso. Amor es disfrutar hasta de la lluvia, del frío o del calor, porque siempre tendremos como combatirlos juntos. Amor es que me aguantes cuando estoy insoportable y me quieras más todavía, y me beses para callar mis quejas. Amor es mirarme en el espejo y sentirme guapa, porque tú no te cansas de hacérmelo sentir. Amor, en definitiva, es haber encontrado a alguien como tú. 

miércoles, 2 de septiembre de 2015

20 Songs Tag.

¡Buenas noches!  Hoy me gustaría dejaros una entrada un poco especial y distinta a las demás. Sé que siempre dejo textos que voy escribiendo cada día, pero hoy he visto este tag por internet y no me he podido resistir a hacerlo. Me ha parecido buena idea compartirlo para que me conozcáis un poco más. Mil gracias por leerlo.

20 SONGS TAG:

1.      Canción favorita:
“Te entiendo” Pignoise.
No sé qué tiene que me encanta. Quizá por la letra, quizá porque me transporte a muchos años atrás. Es de esas canciones que de siempre me han gustado y siempre me gustarán.


“Hero” Mariah Carey.
Una canción con un mensaje precioso. Si antes era de mis favoritas, este año, que la cantaron en mi graduación, se ha convertido en mi super favorita. “No hay un héroe como tú..”


2.      Canción que más odias:
“Corazón Salvaje” Marcela Moreno.
No soporto esta canción, ni su ritmo ni nada. No puedo con ella.



3.      Canción que te pone triste:
“Sense tu” Teràpia de Shock.
Es escucharla y venirme un pelín abajo. Es de esas canciones que son bonitas, pero a la vez te dan tristeza.


“Te recuerdo” Jorge Moreno.
Aparte de que adoro cada cosa que compone Jorge, esta canción me toca el corazón, y cada vez que la escucho me dan ganas de llorar. Muchísimas.


4.      Canción que te recuerde a alguien.
“Tardes negras” Tiziano Ferro.
“Hazme un muñeco de nieve” Frozen.
Las dos me recuerdan a mi hermana. La primera, porque nos encantaba y siempre ha sido como “nuestra canción”. La segunda, porque no nos paran de repetir que les recordamos a las hermanas de la gran película de Disney y esta canción es tan bonita y dulce que...  sobran las palabras.


5.      Canción que te ponga feliz:
“Sugar, sugar” The Archies.
“I love to love” Tina Charles.
Dos canciones que, aunque tienen muchos años a la espalda, las escucho y me sale la sonrisilla.


“Orgullo” El Barrio.
No hay manera de que escuche esta canción y no arranque a cantar. Nunca falla.

“Budapest” George Ezra.
Me pone feliz y, sobre todo, me da tranquilidad.


6.      Canción que te recuerda a un momento específico:
“Maquillaje” Mecano.
Canción mitiquísima que me recuerda a mis tiempos de instituto, ya que la tuvimos que cantar en una batalla de coros que organizamos.


“Por qué te vas?” Jeanette.
Solamente tres personas sabemos de el recuerdo que trae esta canción. Increíble.


“Wannabe” Spice Girls.
En el colegio, me apunté al teatro e hicimos una obra de brujas. Adivinad qué canción fue la que bailamos con escobas incluidas para terminar la función.


“Yeah” Usher.
Otra canción que bailé cuando iba a 6º de Primaria. Y cómo me gusta a mí el ritmillo de esta canción.

7.      Canción cuya letra te sabes perfectamente:
“Hay un lugar” Teen Angels.
“Mi estrella blanca” Fondo flamenco.
“Obsesión” Aventura.
“Voy a ser el Rey León” y, en general, la mayoría de las películas de Disney.

Poco más que explicar, canciones que  me sé enteritas (aunque hay muchas más).


8.      Canción que te haga bailar:
“Down” Junior.
“The next episode” D.Dre, Snoop Dog.
“Bills” Lunchmoney Lewis.

Siempre siempre que empieza a sonar cualquiera de estas canciones, el movimiento de mi cuerpo es instantáneo.




9.      Canción que te ayuda a dormir:
“En el muelle de San Blas” Maná.
El ritmo y la letra me hacen meterme en una historia que me va transportando y relajando. Me encanta.

Bso Forrest Gump.
Quizá muchas BSO me relajan y me ayudan a dormir, pero esta es de las más clásicas y de mis favoritas.

10.  Canción que te gusta en secreto:
“Me he enamorado” La Húngara.
Aunque no es nada secreto que me guste el flamenquito, quizá que me guste concretamente La Húngara si sorprende a más de uno.


11.  Canción con la que te sientes identificado:
“16 añitos” Dani Martín.
“La línea” Dani Martín.
Desde el primer momento en que las escuché me dije: Dani, ¿me has leído la mente? En serio, son dos canciones que me describen totalmente.


“Out here on my own” Nikka Costa.
Otra de las canciones que me encanta y es que cada cosa que dice es un pedacito de mí.


12.  Canción que te solía encantar y ahora odias:
“Womanizer” Britney Spears.
Es una canción que al principio me llamaba la canción, incluso me invitaba a bailar, pero conforme se fue escuchando más le cogí un poco de “tirria”.


13.  Canción de tu disco favorito:
Disco: Dani Martín- Dani Martín. Canción: “Emocional” Dani Martín.
Me quedo con esta canción porque ADORO la letra y su significado, pero podría quedarme casi con el disco al completo, con todas y cada una de las canciones.

14.   Canción que puedes tocar con algún instrumento:
Bso Picapiedra.
La aprendí en el instituto con la flauta. Es triste, pero es el único instrumento que “medio” sabía tocar.

15.  Canción que te gustaría cantar en público:
“Beautiful” Christina Aguilera.
“Imagine” John Lennon.
Dos canciones PRECIOSAS y sobre todo, con unos mensajes que me encantaría poder transmitir a todo el mundo, por eso me gustaría cantarla en público.


16.  Canción que te gusta para conducir:
“Pa’ Madrid” El Barrio.
Me anima, me hace sonreír,... conducir no es algo que me apasione pero creo que, con esta canción de fondo, me iría hasta el fin del mundo en coche.

17.  Canción de tu infancia:
“Cumpleaños feliz” Parchís.
Creo que mis 7/8 primeros cumpleaños de mi vida fueron acompañados de esta canción. Me recuerda a mi infancia en general, y a esos días donde nos juntábamos toda la familia en el salón de mi casa, a celebrar mi cumpleaños, con bailes, cantos, risas y mucho mucho amor incluido.


“Mi música es tu voz” Operación Triunfo 1.
Operación Triunfo fue el programa que más marcó mi infancia. Cantaba sus canciones, coleccionaba sus fotos, no me perdía ningún programa...


“La locura automática” La Secta.
No es de la infancia exactamente, pero sí de principios de mi adolescencia. La escucho y me transporto a esos primeros años de instituto.


“The Model” Kraftwerk.
Mi hermana y yo en un sofá haciendo trastadas frente a una cámara (no me canso de ver ese vídeo): definición gráfica de esta canción.

Disney.
Y es que todas las canciones de las películas de Disney, han ido acompañándome desde que era una enana.

18.  Canción que nadie espera que te guste:
“No sé” Melody.
Y lo peor no es que me guste, sino que me encanta y la canto a voz en grito cada vez que suena.


19.  Canción que quieres que suene en tu boda:
“Just the way you are” Bruno Mars.
Siempre lo he dicho y es que esta canción es PERFECTA.



20.  Canción que quieres que suene en tu funeral:
“I will always love you” Whitney Houston.
Como un mensaje que me encantaría dar a mis seres queridos, que nunca se olviden de que los quiero y los quise.


“What a wonderful world” Louis Armstrong.
Es irónico, pero creo que sería precioso que en ese momento sonara una canción como ésta. Y es que el mundo es maravilloso, aunque haya momentos difíciles y me encantaría que sonara para recordárselo a mi gente ese día.


“En mi corazón estarás” BSO Tarzán.
Igual que con la canción de Whitney Houston, tiene un mensaje que me gustaría que escucharan y lo tuvieran presente siempre, aunque yo ya no estuviera.


domingo, 30 de agosto de 2015

Quiero que me quieras.

Y que me abraces. Y nunca más sentirme sola. No quiero volver a sentir que sobro en el mundo. Quiero pensar que al menos para una persona, soy importante. Me gustaría que me mirases como la única estrella que consigue dar luz en una noche oscura. Que me besases, bebiendo de mí, como alguien bebe agua en el desierto después de todo un día andando. Que me agarrases, y no me soltases. Nunca. Que me hicieras sentir que soy tuya. Que soy tu tesoro más preciado, aquel que los niños esconden bajo la almohada, rezando para que nadie más lo encuentre. Que me levantes del suelo y me hagas sentir que puedo tocar el cielo sólo con alzar las manos. Quiero ser eso que nunca desees perder. Quiero ser tu orgullo, alguien de quien hablas sin poder quitar esa sonrisa de la cara y con brillo en los ojos. Quiero que me quieras. Quiero que me quieras como nunca antes me han querido. 

jueves, 13 de agosto de 2015

Cree

¿Alguien te ha dicho alguna vez lo mucho que te quiere? ¿Te han dicho que eres la persona más especial que jamás han conocido? ¿Que no hay nadie como tú? ¿Qué eres único? ¿Que nunca nadie podrá ocupar tu lugar? ¿Que eres capaz de conseguir todo lo que te propongas? Parecen cosas típicas que todo el mundo espera escuchar de las personas que tiene al lado. Pero.. 
¿Y si en vez de tomárnoslas como simples palabras de cariño y fuerza nos las tomamos como algo real? Creéte que te quieren de verdad, que eres alguien especial... Cree que tus defectos y virtudes son los que te hacen único y que no habrá nadie nunca que ocupe tu lugar, porque cada uno de nosotros somos irreemplazables. Cree que puedes conseguir todo y acabarás consiguiéndolo, porque nada puede más que una mente positiva y muchas ganas de luchar. Y es que, siempre que nos dicen algo bonito, tratamos de quitarle importancia. La vida ya es demasiado complicada como para hacerla más dura anteponiendo los malos comentarios a los pensamientos llenos de positivismo. Así que, creéte lo mucho que vales y acabarás comiéndote el mundo.

domingo, 19 de julio de 2015

Esa chica...

Y aunque sé que hay mil cosas en esta vida que pueden hacerte feliz, siempre he querido ser esa chica. Esa chica de la que te enamoras perdidamente. Esa chica a la que le mandas un mensaje de buenos días cada mañana para despertarla con una sonrisa. Esa chica a la que recoges a la salida de clase por sorpresa. A la que, en algún momento inesperado, le dedicas una canción; una de esas canciones que te llegan al corazón y que a partir de ese día tendrá otro significado, más bonito, más real. Esa chica a la que le haces sentir día tras día que es especial, que vale mucho más de lo que piensa. Esa chica que puede salir de cualquier forma a la calle, porque ahí estarás para decirle lo preciosa que está sin maquillar. Esa chica que tiene la oportunidad de escuchar mil “te quieros” sinceros, de corazón. Esa chica que se refugia en tus brazos y se olvida del mundo entero. Esa chica en la que piensas al mismo levantarte. Y en la que piensas justo antes de dormirte. Esa chica que al escuchar su nombre te sale la sonrisita tonta. Esa chica a la que te encanta pasear de la mano y gritarle al mundo entero que estás con ella y que la quieres. Esa chica en la que confías más que en nadie, a la que le cuentas tus problemas porque sabes que siempre estará ahí. Esa chica con la que compartes todo, porque ya no imaginas una vida sin ella. Esa chica con la que no tienes miedo a hacer planes de futuro, porque sabes que durarás toda una vida a su lado. Esa chica con la que puedes hablar de cualquier cosa, porque te escucha, te aconseja y te comprende. Esa chica que hace que no mires a ninguna otra, porque ella es y será la única en tu vida. Esa chica a la que no aguantas ver llorar y harías cualquier locura para sacarle una sonrisa. Esa chica a la que te gusta besar, acariciar y dar mimos durante horas.

Esa chica... de la que admites estar enamorado. 

lunes, 6 de julio de 2015

Echo de menos..

Entonces, ¿sigues queriéndole? ¿Lo echas de menos todavía? No y no. No sigo queriéndole, ni siquiera lo echo ya de menos. Simplemente echo de menos esa sensación de estar en las nubes todo el día, de tener siempre esos nervios e ilusión por verle, de mirar el móvil con la esperanza de tener un mensaje suyo (aunque sea contándome alguna chorrada), que me abrace y me haga olvidar el mundo que hay alrededor. Echo de menos el sentirme la chica más guapa del mundo simplemente porque él me lo decía. Echo en falta la manera en que me miraba, me sonreía y me hacía sentir segura. Y es que me encantaba la forma que tenía de hacerme reír, las ganas que le echaba para que yo misma me quisiera un poco más. Me gustaba la idea de volver a verle, de mirar a lo lejos y ver que al final del camino estaba él, esperándome con ganas, las mismas ganas que tenía yo de tenerlo a mi lado de nuevo. Echo de menos sentir que soy especial, tan especial que alguien me había elegido para compartir sus días conmigo. Así que no, no echo de menos a la persona, sino a los momentos y recuerdos compartidos con ella. 

domingo, 3 de mayo de 2015

Ilusionarnos por la vida

Y ahí estaban ellos, 27 personitas esperando que les dieras los buenos días, que les dijeras lo guapos que iban y lo campeones que eran por saber abrocharse el baby “ellos solitos”. Uno te saludaba tímidamente, otro te sonreía desde su sitio cada vez que le mirabas; otros, un poquito más atrevidos, se subían a tus brazos en cuanto veían la menor oportunidad, o se te enganchaban a una pierna para impedirte andar. Y cuando llegaba la hora de hacer la fila para cambiar de aula, algunos se negaban a engancharse a su compañero de delante, porque preferían ir cogidos de tu mano, les daba mayor seguridad tenerte al lado. ¡Y qué bonito era cuando te llamaban continuamente para enseñarte lo bien que hacían las fichas! ¡Y cómo les gustaba ver que les felicitabas y les ponías una “carita sonriente” por lo bonito que había quedado su dibujo! Y, aunque algunos se resistían a comer su bocadillo a la hora del desayuno, con unos cuantos mimos y un poco de paciencia, conseguías que, al menos se comiera la mitad antes de salir el recreo.
El recreo, la hora de jugar, la hora de ver a los demás niños del colegio. ¡Qué abrazos te daban los que aún no te habían visto en todo el día! Otros te contaban lo que habían hecho el fin de semana y otros te preguntaban que cuándo irías a su clase a “estar con ellos”. A veces, te faltaban brazos, ojos y oídos para abrazar, coger, mirar y escuchar a todos los que se animaban a pasar el recreo junto a ti.

Terminabas los días llenos de sonrisas, abrazos, muchos “te quiero” sinceros, alguna que otra rama que te regalaban, dibujos, y, lo más importante, con muchos más valores que aprendías de ellos, los más pequeños de la sociedad. Y es que los niños tienen más para enseñarnos de lo que muchos imaginamos, nos enseñan el poder de un abrazo, nos enseñan a pedir perdón sin rencores, a olvidar lo malo y disfrutar de lo bueno, a vivir el presente, a soñar, a ilusionarnos por la vida...